La empresa española Eco-Raec cuenta con los derechos de explotación para España, Francia y Portugal y esta semana ha presentado el prototipo en el Salón Internacional de Energía y Medio Ambiente (GENERA), celebrado en Madrid. Las primeras pruebas se realizarán a finales de julio en Inglaterra.
Cuanto más tráfico, mejor. El sitio idóneo es el acceso a centros comerciales, peajes o aparcamientos, donde el tránsito de vehículos es continuo. Y la aplicación directa de la electricidad generada es el suministro a semáforos o farolas, el alumbrado del centros de ocio, y la iluminación interior de aparcamientos. "En caso de que haya soportes que precisen de energía eléctrica en las inmediaciones, la electricidad se puede verter a la red", explica el director de Eco-Raec, David López.
Además de colocar estas bandas en una plataforma artificial en el suelo, Hughes propone situarlas en badenes que obliguen a reducir la velocidad. La electricidad producida iluminaría los paneles de advertencia de límite de velocidad y zona residencial.
"Con unos 5.000 vehículos a la hora se pueden generar 160 kw/hora, lo que equivale a iluminar 400 farolas durante un día, por ejemplo", señala López.